Pigmentos y
colorantes:
La búsqueda de sustancias colorantes u otros medios idóneos, ha
sido habitual en todas las civilizaciones.
En las sociedades primitivas usaron materias primas de origen
vegetal o mineral, en la actualidad los materiales colorantes necesarios
para la expresión cromática se elaboran por medios químicos.
Los pigmentos, imparten a las pinturas, el color y la opacidad.
Cuando las pequeñas partículas insolubles son incoloras y no dan
opacidad, se las llama cargas o extendedores, tienen un papel muy
importante, regulando el brillo y la permeabilidad de las pinturas.
Las cargas más usadas son: caolín, barita, carbonato de calcio,
talco, etc.
El tener compuestos coloreados (tintas, colorantes, pigmentos), es
primordial para la existencia de las técnicas pictóricas.
Los materiales usados para hacer una capa pictórica se llaman
pigmentos.
Estos están formados por polvos muy finos, coloreados e insolubles,
que al mezclarse con el aglutinante o vehículo, forman una pasta más o
menos densa, que ostenta propiedades cubrientes a veces muy notables.
En la pintura, los pigmentos y las cargas, están dispersados en el
aglutinante o vehículo, están profundamente mezclados.
Los colorantes, son sustancias transparentes, solubles y capaces de
transferir su propio color a otros materiales incoloros, por absorción y
por formación de enlaces químicos estables con ellos.
Para que los colorantes se puedan usar en pintura, se deben
transformar en pigmentos y esto se hace generalmente, haciendo que polvos o
geles de materiales inertes e incoloros, a veces translúcidos, absorban y
fijen el colorante y se conviertan en soportes coloreados, que luego al ser
mezclados con el aglutinante, formarán una pasta parecida a la de los
pigmentos.
Cuando el soporte que proporciona cuerpo al colorante es un gel
traslúcido, el pigmento que se obtiene se llama laca.
Según su composición química, los pigmentos se clasifican en
orgánicos (animal o vegetal), inorgánicos (mineral) y sintéticos.
Los primeros, están compuestos primordialmente por carbono e
hidrógeno, son siempre de origen vegetal o animal, mientras que los
inorgánicos, son de origen mineral y están constituidos por óxidos,
carbonatos, sulfuros, etc, de varios metales, y generalmente, tienen una
estructura cristalina.
Un pigmento debe tener tres propiedades fundamentales:
- Ser insoluble en el aglutinante y en la mayoría de los
disolventes, incluso el agua.
- Debe ser químicamente estable.
- Debe poseer cierta apatía con respecto a las sustancias con las
que se los suele mezclar.
El solvente tiene como misión, disminuir la viscosidad del
filmógeno para que se puedan aplicar capas delgadas por medio de pinceles,
rodillo, muñeca, soplete, etc.
Generalmente, una pintura no está, bajo altas temperaturas, ni se
conserva en ambientes fuertemente ácidos o alcalinos, sin embargo, la luz,
el aire y los agentes contaminantes, sumado a la humedad, pueden alterar
las propiedades y la composición de los pigmentos.
Los pigmentos orgánicos son inestables si se exponen a la luz y
suelen disolverse.
Los pigm. Inorgánicos son menos sensibles, pero pueden sufrir
alteraciones químicas degradantes, por ej, los formados por cromatos
(amarillos), pueden sufrir reacciones redox que los transforman en óxidos
de cromo (verdes).
Cuando la iluminación contiene radiaciones de pequeña longitud de
onda y energía elevada, como las azules, las violetas y los rayos
ultravioletas, pueden en períodos cortos de tiempo, degradar algunos
pigmentos.
La opacidad de un color, esta relacionada con su capacidad de
absorción de la luz y con su índice de refracción y el tamaño de sus
partículas, en esto tiene gran importancia el aglutinante.
Los pigmentos en agua poseen mayor índice de refracción que los
mezclados con aceites.
El índice de refracción, n, es un parámetro propio de cada medio
que indica el comportamiento de la luz al atravesarla.
Preparación del color para pintura mural:
Los pigmentos usados en pintura mural al fresco deben ser estables
a los ácidos, álcalis, luz, y agentes atmosféricos, no ser tóxicos y ser de
muy buena calidad.
Una manera sencilla de saber si los pigmentos son estables a la
cal, consiste en mezclarlos con cal al 5% y dejar reposar durante 1 hr,
luego de ese tiempo, ver si el color ha variado.
Los pigmentos ideales son los inorgánicos naturales llamados
tierras, las tonalidades dependen del lugar de extracción, como blanco debe
usarse la cal misma.
Para fabricar las tintas es necesario hidratar el pigmento, la cal
incorporada en el mortero es la que actúa como aglutinante mientras la capa
permanece húmeda.
Es importante recordar, que estos colores al secar aclaran.
Una vez seca esta pintura, se puede retocar con pinturas al temple.
LA BLADOUSSE de
Patricia Aparicio Bravo
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